Monitoreo de gas a granel

Una solución desconocida, ideal para restaurantes, hoteles e industria en general.

La transformación digital ha permeado casi todos los procesos en las empresas, desde la trazabilidad de insumos hasta la gestión financiera. Sin embargo, muchas organizaciones aún mantienen un punto ciego crítico: el control del gas a granel, una fuente de energía esencial en sectores como la industria manufacturera, la hotelería, la gastronomía y el comercio.

El monitoreo de este recurso ha sido, históricamente, un proceso manual o intuitivo. Se confía en la experiencia, en las estimaciones o en la simple observación del manómetro. Este método no solo es impreciso, sino que deja espacio a errores costosos: interrupciones de servicio, paradas de producción, y sobre todo, una incapacidad de anticiparse a la demanda energética.

¿Por qué necesitamos monitorear el gas a granel?

A diferencia de otros recursos energéticos que se pueden medir con facilidad y de forma continua (como la electricidad), el gas en estado líquido o comprimido almacenado en estanques suele carecer de una interfaz digital que permita saber, con exactitud, cuánto queda y cómo se está utilizando.

Esto tiene múltiples consecuencias:

  • Pedidos de recarga tardíos o anticipados.
  • Sobrestock innecesario o quiebres críticos.
  • Imposibilidad de hacer una planificación energética a mediano plazo.
  • Falta de datos históricos para análisis de eficiencia o sostenibilidad.

Frente a este escenario, surge una necesidad clara: digitalizar el control del gas a granel, transformándolo en un sistema gestionado por datos, no por suposiciones.

Tecnología aplicada: sensores + plataforma

En los últimos años, la tecnología IoT ha hecho posible una revolución en este ámbito. Sensores de presión y volumen, especialmente diseñados para entornos industriales, permiten capturar información del estanque en tiempo real. Esa información viaja a la nube y se visualiza en plataformas web o móviles.

Así, el responsable de mantenimiento, el encargado de cocina, o el administrador de una planta puede, desde su teléfono o computador, saber:

  • Cuánto gas queda en el estanque.
  • Cuál ha sido el consumo diario, semanal o mensual.
  • Si hay alguna anomalía en el consumo (por ejemplo, una fuga o un uso fuera del patrón).
  • Cuándo será necesario reponer el gas, según la proyección del consumo histórico.

Esta es la propuesta que ha comenzado a implementarse con éxito en empresas de diversos sectores, donde el gas es parte estructural de la operación.

Aplicaciones prácticas: del restaurante al horno industrial

El uso de gas a granel no se limita a las grandes plantas. Muchos restaurantes, por ejemplo, lo utilizan para su cocina industrial. Un quiebre de suministro en plena jornada afecta directamente la atención al público y genera pérdidas inmediatas. El monitoreo, en este contexto, permite actuar preventivamente.

En el caso de los hoteles o centros turísticos, donde la calefacción, el agua caliente o la cocina dependen del gas, tener control sobre el consumo permite enfrentar con anticipación la demanda estacional, evitando inconvenientes con los huéspedes o sobrecostos por recargas urgentes.

En la industria, donde el consumo de gas es alto y constante, la información en tiempo real permite optimizar procesos, reducir desperdicio energético y planificar mejor la logística de compra.

Datos que importan: consumo, histórico y proyecciones

Una de las grandes ventajas de estos sistemas no es solo saber cuánto gas queda, sino cómo se ha consumido. El registro histórico permite identificar patrones, optimizar turnos, ajustar procesos térmicos e incluso detectar anomalías o pérdidas invisibles.

Además, con base en estos datos, se generan proyecciones automáticas, que ayudan a planificar el abastecimiento con más precisión. Este punto es clave para empresas que buscan eficiencia energética y reducción de costos.

Notificaciones y autonomía

El sistema también puede enviar notificaciones automáticas por correo, app o mensaje, cuando el nivel del estanque está por debajo del umbral configurado. Esto permite mantener informados a los equipos sin tener que revisar constantemente la plataforma.

Y lo más importante: todo funciona sin intervención humana, en segundo plano, 24/7. El monitoreo se transforma así en una herramienta de apoyo a la operación, no en una carga adicional.

Conclusión: una pieza clave en la eficiencia operativa

La digitalización del monitoreo de gas a granel es una decisión estratégica, no solo técnica. Permite a las empresas mejorar su continuidad operativa, reducir pérdidas, planificar de forma inteligente y tener control sobre un recurso esencial.

A medida que más organizaciones adoptan tecnologías de transformación digital, dejar fuera el control del gas resulta cada vez menos justificable. La inversión en sensores y plataformas de monitoreo es baja comparada con el impacto que puede tener una falla por desabastecimiento o una fuga no detectada.

El futuro del gas a granel no es solo físico, es también digital, conectado y predecible.

José Campos Retamales – CTO y funador de Bimaker SpA